Particionar el disco duro se refiere simplemente al acto de dividir el disco en secciones. De esta forma cada sección es independiente de las otras. Es como colocar paredes dentro de una casa, si añade muebles a una habitación no afecta a las otras.
Si ya tiene un sistema operativo en su ordenador (Windows 9x, Windows NT/2000/XP, OS/2, MacOS, Solaris, FreeBSD, …) y desea colocar Linux en el mismo disco, necesitará reparticionar el disco. Debian requiere sus propias particiones de disco duro. no puede instalarse en particiones de Windows o MacOS. Podría tener la posibilidad de compartir algunas particiones con otros sistemas Linux, pero este tema no se cubre en este manual. Al menos necesitará una partición dedicada para el sistema de ficheros raíz de Debian.
Puede encontrar información del estado actual de sus particiones usando una herramienta de particionado para su sistema operativo actual , como fdisk o PartitionMagic . Las herramientas de particionado siempre disponen de una opción en la que se pueden mostrar las particiones existentes sin realizar cambios.
En general, cambiar una partición con un sistema de ficheros existente destruirá cualquier información que contenga. Por lo tanto, siempre deberá efectuar copias de seguridad antes de hacer un reparticionado. Usando la analogía de la casa, probablemente querría mover todos los muebles antes de mover una pared, en caso contrario se arriesga a destruirlos.
Si su ordenador tiene más de un disco duro, podría usar uno de ellos para dedicarlo completamente a Debian. De ser así, no necesita particionar este disco antes de iniciar el sistema de instalación; el instalador incluye un programa de particionado que puede hacer el trabajo adecuadamente.
Si su máquina solamente tiene un disco duro y desea reemplazar totalmente el sistema operativo actual con Debian GNU/Linux, también puede esperar a particionar como parte del proceso de instalación (Sección 6.3.2.1, “Particionando sus discos”), después de que inicie el sistema de instalación. Sin embargo solamente funciona si planea arrancar el sistema de instalación desde cinta, CD-ROM o ficheros en una máquina conectada. Considere lo siguiente: si arranca desde ficheros ubicados en el disco duro y luego particiona el mismo disco duro donde está el sistema de instalación, eliminando por tanto los ficheros de arranque, más le vale que la instalación sea exitosa la primera vez. Al menos en este caso, debería tener alguna alternativa para revivir su máquina, como cintas o CDs del sistema de instalación original.
Si su máquina ya tiene particiones múltiples y suficiente espacio en el disco duro que pueda añadirse al eliminar y reemplazar una o más de éstas, entonces también puede esperar y usar el programa de particionado del instalador. Todavía deberá leer el material siguiente, puesto que podría haber circunstancias especiales, tales como el orden de las particiones existentes en el mapa de particiones, que inevitablemente le fuercen a particionar antes de instalar.
Si su máquina tiene un sistema de ficheros FAT o NTFS, como el que usa DOS y Windows, puede esperar y usar el programa de particionado del instalador de Debian para redimensionar el sistema de ficheros.
En cualquier otros caso, necesitará particionar su disco duro antes de iniciar el proceso de instalación para crear espacio particionable para Debian. Si algunas de las particiones pertenecerán a otros sistemas operativos, deberá crearlas usando los programas nativos de particionado de esos sistemas operativos. No le recomendamos que intente crear particiones para Debian GNU/Linux con las herramientas de otros sistemas operativos. En su lugar, simplemente deberá crear las particiones nativas del sistema operativo que desee quedarse.
Si va a instalar más de un sistema operativo en la misma máquina, deberá instalar todos los sistemas operativos antes de proceder con la instalación de Linux. Las instalaciones de Windows y otros sistemas operativos pueden destruir su capacidad de iniciar Linux o animarle a formatear de nuevo particiones que no sean nativas.
Puede recuperarse de estas acciones o evitarlas, pero evitará estos problemas si instala primero el sistema nativo.
Si actualmente tiene un disco duro con una partición (una configuración común para ordenadores de escritorio) y desea un sistema multiarranque con el sistema operativo nativo y Debian, necesitará:
Efectuar copias de seguridad de todo lo existente en el ordenador.
Arrancar desde el medio de instalación del sistema operativo nativo como CD-ROM o cintas.
Usar las herramientas nativas de particionado para crear particiones de sistema nativas. Deje una partición o espacio libre para Debian GNU/Linux.
Instalar el sistema operativo nativo en su nueva partición.
Arrancar nuevamente en el sistema operativo nativo para verificar que todo esté bien, y descargar los ficheros de arranque del instalador de Debian.
Arrancar el instalador de Debian para continuar la instalación de Debian.
Es recomendable que use o bien el esquema mostrado a continuación o bien las herramientas nativas de Windows o DOS si está manipulando particiones FAT o NTFS ya existentes. No es necesario particionar desde DOS o Windows si no tiene estas particiones, generalmente las herramientas de particionado de Linux harán mejor esta tarea.
Debe ubicar su partición de arranque del sistema Debian cuidadosamente si tiene un disco IDE grande y no está usando ya sea direccionamiento LBA, controladores sobrepuestos (N. de t. «overlay») (a veces proporcionados por fabricantes de discos duros) o una BIOS nueva (fabricada después de 1998) que soporta acceso a extensiones de discos grandes. En este caso tendrá que ubicar la partición de arranque dentro de los primeros 1024 cilindros de su disco duro (usualmente cerca de los 524 megabytes, sin traducción de la BIOS). Esto puede hacer necesario que mueva una partición FAT o NTFS existente.
Una de las instalaciones más comunes es la que se produce en sistemas que ya tienen DOS (incluyendo Windows 3.1), Win32 (como Windows 95, 98, Me, NT, 2000, XP) o OS/2 y en los que desea instalar Debian en el mismo disco sin destruir el sistema anterior. Tenga en cuenta que el instalador es capaz de redimensionar sistemas de ficheros FAT y NTFS usados por DOS y Windows. Sólo debe iniciar el instalador, seleccionar la opción
, seleccionar la partición a redimensionar e indicar su nuevo tamaño. Así, en la mayoría de los casos no necesita usar el método descrito a continuación.Antes de proseguir, deberá decidir cómo dividir el disco. El método de esta sección solamente dividirá la partición en dos. Una contendrá el sistema operativo original y Debian utilizará la otra. Durante la instalación de Debian, se le dará la oportunidad de usar la parte del disco correspondiente a Debian como mejor le parezca, esto es, como partición de intercambio o como sistema de ficheros.
La idea es mover toda la información de la partición al inicio antes de cambiar la información de la partición, de modo que nada se perderá. Es importante que haga lo menos posible entre el movimiento de la información y el reparticionado, de forma que se minimicen las posibilidades de escribir un fichero cerca del final de la partición, ya que esto reduciría la cantidad de espacio de la partición que podría utilizar.
Lo primero que se necesita es una copia de fips,
disponible en el directorio tools/
dentro de la réplica de Debian más cercana. Desempaquete el archivo y
copie los ficheros RESTORRB.EXE
,
FIPS.EXE
y ERRORS.TXT
a un
disquete arrancable. Puede crear un disquete arrancable usando la
orden sys a:
en DOS. fips
viene acompañado de una documentación muy buena que debería leer. Definitivamente
necesitará leer la documentación si usa compresión de disco o un
gestor de disco. Cree el disco y lea la documentación
antes de defragmentar el disco.
A continuación necesitará mover todos los datos al inicio de la partición. Puede realizar ésta tarea fácilmente con el programa defrag, que viene incluido con DOS 6.0 y versiones posteriores. Vea la documentación de fips para una lista de otros programas que puedan ayudarlo. Note que si tiene Windows 9x, debe ejecutar defrag desde éste, puesto que DOS no reconoce el sistema de ficheros VFAT, necesario para el soporte de ficheros con nombres largos, y que utiliza Windows 95 y versiones posteriores.
Una vez haya ejecutado el defragmentador (su tarea puede tomar un cierto
tiempo en un disco grande), debe reiniciar con el disquete que creó para
fips. Simplemente escriba
a:\fips
y siga las instrucciones.
Tenga en cuenta que existen muchos otros gestores de particiones, en caso de que fips no pueda ayudarlo.
Si está particionando para discos DOS, o modificando el tamaño de las particiones DOS, con herramientas de Linux, debe saber que muchas personas experimentan problemas al trabajar con las particiones FAT resultantes. De hecho, algunos han informado de bajo rendimiento, problemas de consistencia con scandisk u otros fallos extraños en DOS o Windows.
Aparentemente, cada vez que cree o modifique una partición para uso de DOS es una buena idea llenar los primeros sectores con ceros. Haga esto antes de ejecutar la orden format de DOS, puede ejecutar lo siguiente desde Linux:
# dd if=/dev/zero of=/dev/hdXX bs=512 count=4